LA CONSOLIDACIÓN DEMOCRÁTICA (1979-1982)
Una vez concluido el período constituyente, se convocaron nuevas elecciones en el año 1979 y otra vez las ganó la UCD, Adolfo Suárez debía afrontar varios desafíos. Entre ellos destacaron las segunda crisis del petróleo, la puesta en marcha del Estado de las Autonomías, el terrorismo y la presión militar.
Las elecciones generales de 1979
La UCD de Suárez volvió a ganar; consiguió 168 escaños. El PSOE y el PCE también obtuvieron resultados ligeramente mejores.
Suárez sufrió un grave desgaste político, fruto de la multitud de frentes abiertos, había estallado la segunda crisis del petróleo, que duplicó su precio entres ese año y 1981. Así la mala situación económica, se recrudeció, lo que provocó más conflictividad social. El PSOE presentó una moción de censura contra Suárez, este quedó políticamente muy debilitado.
El Gobierno comenzó las negociaciones para la creación de las comunidades autónomas; junto a otros asuntos controvertidos, como la ley del divorcio o la reforma fiscal, conllevó conflictos internos en la UCD. Las disputas provocaron el desgaste del Gobierno. Suárez lo acusaron de personalismo. Finalmente en 1981 el presidente del Gobierno dimitió ante la sorpresa de todos.
El Estado de las Autonomías
Los resultados electorales de 1977 evidenciaron que era necesario atender las reivindicaciones de las nacionalidades históricas, especialmente en Cataluña y el País Vasco. La Constitución contemplaba dos caminos para conseguirla, la vía lenta, para las comunidades de nueva creación. En cambio, para las nacionalidades históricas se dispuso la vía rápida, pudieron asumir inmediatamente todas las competencias atribuidas en la Carta Magna. Andalucía también reclamó erigirse como comunidad histórica y adoptar la vía rápida. Para Navarra, también considerada nacionalidad histórica, se creó un mecanismo especial.
En el caso catalán, que ya había tenido Estatuto de Autonomía durante la Segunda República, Suárez negoció el retorno de Josep Tarradellas, presidente de la Generalitat en el exilio. El Estatuto de Autonomía de Cataluña fue promulgado en diciembre de 1979.
El Estatuto de Autonomía vasco, basado en los fueros (las leyes por las que se rigieron el reino de Navarra y los territorios vascos hasta el fin del absolutismo), también se aprobó en diciembre de 1979.
El País Vasco había tenido estatuto durante la Segunda República. Se creó un Consejo General Vasco, que negoció las condiciones de la autonomía. El concierto económico y la relación con Navarra.
El Galicia también se había aprobado un Estatuto de Autonomía durante la Segunda República, aunque no entró en vigor por la Guerra Civil. En 1979 se reunió la Asamblea de Parlamentarios gallegos para solicitar la vía rápida. Ceuta y Melilla en 1995 obtuvieron sus Estatutos de Autonomía.
El resultado final fue la creación de 17 autonomías y 2 ciudades autónomas.
La violencia terrorista
El terrorismo fue uno de los problemas más graves y la causa de mayor alarma social, debido al rechazo de la senda democrática por parte tanto de la extrema izquierda, como de la extrema derecha.
Al terrorismo de ETA se había sumado el de otros grupos de extrema izquierda, especialmente el FRAP (Frente Revolucionario Antifascista y Patriota) y el GRAPO (Grupo de Resistencia Antifascista Primero de Octubre). Sus principales acciones se llevaron a cabo durante la Transición.
El objetivo de todas estas organizaciones terroristas era quitar la credibilidad de la naciente democracia. Muchos de sus atentados estaban dirigidos contra las Fuerzas Armadas y los cuerpos de seguridad del Estado.
Los grupos de extrema derecha estaban formados por nostálgicos del franquismo. No desarrollaron organizaciones estructuradas, sino que emplearon siglas diversas; los más conocidos fueron el Batallón Vasco Español (BVE), la Triple A (AAA) y los (GAE). Estos grupos actuaban en el País Vasco. Han pasado a la historia por sus acciones violentas, pero también por su vinculación con miembros de las fuerzas armadas de seguridad del Estado.
Uno de los ataques mas impactantes fue la matanza de Atocha en Madrid en 1977, contra un despacho de abogados laboralistas de Comisiones Obreras.
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